El principal problema que se le presenta a la recién formada BAA es que el número de ligas de baloncesto creadas desde los años treinta es enorme. Una liga en particular, agrupa a los mejores jugadores del país, la Nacional Basketball League (NBL), la cual esta constituida de equipos ubicados sobre todo en la costa occidental. Esta liga ya esta bien establecida para 1946.
La BAA tiene los dólares y las salas, pero carece de jugadores de talentos y de experiencia. Esta falta de jugadores obliga a los propietario a crear una nueva política que ponga fin a dicho problema. Esta nueva politica consiste en reclutar los mejores jugadores universitarios para conformar así un campeonato que combine la rapidez, el talento y la experiencia.
Otro punto importante es el establecimiento del calendario, el cual esta constituido de tres etapas, la temporada regular, los playoffs y la fase final del campeonato.
La primera temporada es todo un éxito. El equipo Warriors se convierte en el primer campeón de la BAA. La prensa contribuye al desarrollo de la liga, los Diarios, las radios y la televisión difunden algunos de los partidos. Los jugadores de los Warriors embolsan 2000 $ por su victoria.
Philadelphia Warriors Capeones.
El primer entorchado de campeón correspondería a Philadelphia Warriors, liderados desde el banquillo por el legendario Eddie Gottlieb y en la cancha por Joe Fulks y Howie Dallmar vencieron a Chicago Stags en la final por un contundente 4-1. Fulks fue el máximo anotador de la temporada con 23.2 puntos mientras que Dallmar fue uno de los cuatro jugadores que pasaron de las 100 asistencias en la temporada y aquella final la pasó cojeando debido a un pie encallado pero aun así resultó decisivo en el 5 partido en el antiguo Philadelphia Arena.
"Nadie esperaba que jugara", dijo Gottlieb, entrenador de los Warriors, que no puso de titular a Dallmar para que su pie descansara y se pudiera recuperar. Pero más allá de eso, Dallmar se sentó ahí en el banquillo, estuvo insistiendo a Gottlieb para que le dejara jugar y acabó resultando decisivo merced a una canasta ganadora. Con 80-80 en el marcador y con menos de un minuto por jugar, Howie Dallmar saltó a la pista y llevó a los Warriors al 83-80 final y al primer título. Fulks también fue determinante en ese 5º partido con 34 puntos.
Todos los integrantes del equipo se llevaron 2.000 dólares y un anillo de campeón.
Desde la creación de la liga, todo el mundo habla de George Mikan, el mejor jugador de Chicago American en la NBL al cual le habían ofrecido el más grande salario de toda la historia, 12000 $ cada año por cambiarce a la BAA. Decidio no obstante cambiarse a los Minneapolis Lakers, otro equipo de la NBL. Los medios de comunicación y el público se sorprenden de la decisión de este pivote que entonces dominaba la liga.
Esto constituye un freno al desarrollo de la BAA. La temporada paso, en 1948, de 60 partidos a 48 partidos por año. Cuatro equipos dejaron la liga - Toronto, Detroit, Cleveland y Pittsburgh. Todo un desastre para la BAA. Pero afortunadamente en 1948, comienza la verdadera aventura NBA, cuando cuatro equipos de la NBL se incorporan a la BAA- Indianapolis, Rochester, Fuerte Wayne y Minneapolis Lakers-
Es así como la dinastía Lakers comienza dentro de la BAA. Ganan su primer campeonato ante los Washington en la final (4-2). George Mikan se convierte en la primera estrella de la liga anotando gran cantidad de puntos por juego.
A partir de la temporada siguiente, la NBL no puede seguir más el ritmo impuesto por la BAA. Las seis últimas franquicias se incorporan a la BAA para formar la Nacional Basketball Asociación (NBA),. Mikan será de nuevo el mejor anotador (27,4 puntos). A pesar de una difícil organización de los playoffs, los Minneapolis Lakers y su estrella George Mikan adquiere su segundo título.
La NBA no supo administrar las nuevas franquicias de la NBL. Por lo que el número de los equipos de 17, pasa a 11 en 1950.
En esta época surge uno de los equipos mas recordados de todos los tiempos los Boston Celtics. Este equipo es indiscutiblemente el que produce el juego más espectacular. Bob Cousy, líder del Celtics personifica este estilo de juego dictado por el entrenador Red Auerbach.
En 1952-53, George Mikan consigue su tercer titulo con los Lakers y se le apoda como el "Big Man" de la NBA y se convierte en el primer jugador leyenda.
La maldición de los Knicks
New York Knicks empezó a forjar su leyenda bien pronto, los siete primeros años ya habían visitado tres veces las finales de manera consecutiva en el periodo 1951 a 1953.
En su primera aparición frente a Rochester Royals fueron capaces de levantar un 0-3 adverso pero no completaron la remontada y los Royals se alzaron con el anillo tras vencer 75-79 en un fatídico 7º partido. El Hall of Famer Harry Gallatin y Nat Clifton llevaban el peso del equipo y formaban una excelente pareja interior con Max Zaslofsky por fuera.
Las Finales de 1952 y 1953 eran palabras mayores, esperaba Mikan y New York tenía que luchar con Gallatin y Clifton para frenarlo. En 1952 de nuevo se fueron a siete partidos, pero volvieron a sucumbir en el decisivo, sin embargo un año después sería un paseo militar de Minneapolis Lakers que vapulearon 4-1.
En los playoffs de 1953, Boston Celtics y Syracuse Nationals se enfrentaban en semifinales de conferencia. Los Celtics marchaban 1-0 en la serie, y el 2º partido se convirtió en uno de los más recordados de la historia. Boston venció 111-105 tras 4 prórrogas para meterse en la final de la NBA.
El reloj de posesión aún no estaba instaurado, y teniendo a Bob Cousy en el equipo, Boston tenía mucho ganado. Cousy, apodado el ‘Houdini of the Hardwood’ por su manejo de balón, emergió como factor dominante en aquel encuentro. Su técnico, Red Auerbach ordenó guardar la pelota en sus manos, a lo que Syracuse sólo podía frenar por medio de faltas. Acabó yendo 32 veces a la línea de tiros libres (récord en playoffs, la siguiente mejor marca está en poder de Michael Jordan, con 23-28 ante los Knicks en los playoffs de 1989), anotando 30, para acabar con 50 puntos en un partido que se convirtió en un concurso de tiros libres, como muchos de la época, para aburrimiento de los aficionados. Para la historia quedarían esos videos de Cousy en los que aparece driblando a todo aquel que le saliera al paso. El juego se estaba estancando como afirmara el propio Cousy, y una de las medidas para evitar esto era evidente, implantar el reloj de posesión.
Bill Russell.
La revancha de Pettit.
Boston Celtics y St. Louis Hawks mantenían una de las mejores rivalidades de la época, desde 1957 hasta 1961 se enfrentaron en 4 finales. Boston venció en tres ocasiones y los St. Louis en una, en lo que fue la venganza de Bob Pettit. En las finales de 1957, los Hawks de Pettit se dejaron remontar un 3-2 para acabar perdiendo sus primeras finales por 4-3 con un doloroso 7º partido inclusive (125-122 tras dos prórrogas). Aquel título supondría el 1º de los 17 que a lo largo de la historia conseguirían los Celtics.
Pettit, Ed Macauley y Cliff Hagan lideraron a los Hawks a una nueva final, pero el factor determinante como siempre a la hora de la verdad era Pettit. Era el momento de cobrarse la revancha tan sólo un año después. Los Hawks se apuntaron los dos primeros envites en el Boston Garden, y cuando parecía que tenían todo a favor con la serie de vuelta a casa y con Bill Russell lesionado en el tercer partido (y baja para el resto de la final), Boston apeló a la garra y el coraje que les hizo grandes, y empataron la final en los dos partidos disputados en St. Louis. Pettit y sus compañeros se repusieron del mazazo y volvieron a poner la ventaja en la final después de vencer 102-100 en Boston. Tocaba rematar en casa, y ahí apareció Bob Pettit para firmar una actuación antológica: 50 puntos (anotó 19 de los últimos 21 puntos de los Hawks) con canasta decisiva a falta de 15 segundos para dar a St. Louis Hawks su primer y único campeonato tras vencer en el definitivo 6º partido 110-109. Aquella marca era entonces la mejor en un encuentro de playoffs igualada con la de Cousy en 1953. Actualmente, el récord de playoffs está en manos de Michael Jordan, con 63 ante Boston en 1986.
Pettit se convertiría en el primer jugador de la NBA en alcanzar los 20.000 puntos y 10.000 rebotes.